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Vacaciones 2020

Cómo mantener las flores frescas durante el transporte y el almacenamiento

Mantenimiento y transporte adecuado de flores

Mantener las flores frescas durante el transporte y almacenamiento es un factor importante para que lleguen en óptimas condiciones al lugar de destino. Para lograr esto, es fundamental prestar atención a detalles que contribuyen a mantener su belleza y vitalidad durante el mayor tiempo posible.

Para empezar, se deben seleccionar las flores adecuadas para el transporte y almacenamiento. Algunas flores son más resistentes que otras y pueden soportar mejor los cambios de temperatura, falta de agua y manipulación. Para eso, se debe tener en cuenta las características de cada tipo de flor para conocer cuáles necesitan más cuidados.

Una vez seleccionadas las flores, se deben preparar correctamente para el transporte. Esto incluye cortar las puntas de los tallos en ángulo para que puedan absorber mejor el agua, retirar las hojas o pétalos marchitos y sumergir los tallos en agua fresca para que se puedan hidratar de forma adecuada. Durante el transporte, las flores deben estar protegidas del calor y la luz directa del sol, ya que el clima inadecuado puede hacer que se sequen y se marchiten rápidamente. También deben protegerse utilizando papel de seda, papel burbuja y otros materiales que proporcionen una capa adicional de protección.

Para mantener la frescura y vitalidad, es necesario prestar atención a varios factores. La mayoría de las flores se mantienen mejor a temperaturas frescas, en torno a los 15- 18 grados centígrados, otras requieren temperaturas más bajas de lo normal, que pueden ser de 10- 13 grados centígrados. Todo esto con el fin de garantizar su correcta preservación. La humedad en el ambiente puede ser otro factor que se debe tener en cuenta, ya que las flores son sensibles a la falta de humedad y pueden verse afectadas si se almacenan en un ambiente seco. Por ello, se recomienda colocar las flores en recipientes con agua o utilizar medios de conservación florales para tener una temperatura correcta durante su transporte y almacenamiento.

Mantener las flores frescas es importante para garantizar su calidad y atractivo al momento de ser entregadas al destinatario. La temperatura adecuada y constante es fundamental para evitar la degradación prematura de las flores durante su transporte y almacenamiento, todos estos factores contribuyen significativamente a la satisfacción del cliente final.